ZARAGOZA-CANFANC: lo antiguo y lo nuevo... (nota rápida)
Uno hace lo que puede, y lo que puede a veces es poco. Si el tren pasa sin parar, si el sol lanza con fuerza su luz contra la ventana, si encima el cristal está sucio... Bueno, al final sale lo que sale. A veces hay suerte, otras veces no.
Lo bueno de volver por la tarde es que ya conoces los sitios donde tienes que hacer la foto. Y en este caso es un trayecto conocido, así que eso también ayuda. Y pese a todo siempre se quedan fotos sin hacer, o hay fotos que salen mal... Bueno, se hace lo que se puede.
Salimos de Zaragoza a las seis y poco de la mañana. Hasta Huesca casi no paramos. Intento hacer fotos de todas las estaciones, pero me interesan sobre todo las abandonadas, o las que sirven solo como apeadero. Pasamos Villanueva de Gállego, Zuera y Tardienta.
No tengo ninguna suerte con Plasencia, la otra Plasencia, ni a la ida ni a la vuelta. Con Turuñana hago alguna foto "decente". Me encanta ver que la estación sigue en su sitio, que los árboles no se han secado. Y Riglos lo mismo, me encanta ver que no han tirado la estación, solo han tapiado las puertas. Hace años pude entrar dentro y hacer buenas fotos. Entonces el tren aún paraba aquí (al menos en teoría). Ahora hay un apeadero más cerca del pueblo, un apeadero tan elemental y anodino como todos.
Llegamos a Ayerbe. Todo bien, una estación como eran antes todas las estaciones, es decir, con personal que se ocupe de ella y el edificio abierto al público (lo mismo que Sabiñanigo o Jaca, y para de contar). Después vienen varias estaciones bien conservadas, pero cerradas. Al lado han hecho un apeadero que, como se ve aquí, con el grupo de chavales, se queda pequeño en algunos momentos (ahora, no llueve ni nieva, pero y si pasara esto qué..., no, no lo digo por decir, yo sé lo que es estar esperando el tren bajo la lluvia...). Pasamos Santa María de la Peña, Anzánigo y Caldearenas.
La cosa se pone muy muy bonita, increíblemente bonita, de Jaca hasta Canfranc. Solo hay dos estaciones que sean estaciones. Y están cerradas. Si se utilizan, si baja o sube alguien, es como apeadero. Son las de Castiello de Jaca y Villanúa. Hago lo que puedo con las fotos, pero a veces hay que ser muy muy rápido... También hay muchas antiguas casetas, algunas en buen estado, otras mucho peor. No puedo fotografiarlas todas... Me enfado a ratos, pero enfadarse no sirve para nada.
Y llegamos a Canfranc, a lo nuevo y lo viejo... Hay cosas que nunca serán como antes. Es la vida. Por un lado lo entiendo, por otro lado, como "fotógrafo de estaciones abandonadas", ahora tengo menos para fotografiar. Y además todo está en obras, y por tanto, todo está cerrado y no puedo moverme por la zona, como antes podía hacerlo. Pero lo "romántico" de lo abandonado es una trampa. Lo abandonado siempre acaba por desaparecer. Y para que no desaparezca tiene que dejar de estar abandonado. Es la vida. De todas maneras, Canfranc siempre será Canfranc.
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